En el dia internacional de la Mujer... siguen las violaciones a derechos.

EN EL MARCO DEL DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER ORGANIZACIONES DEFENSORAS DE DERECHOS HUMANOS SE PRONUNCIAN ANTE IMPARABLE OLA DE VIOLENCIA E IMPUNIDAD QUE VICTIMIZA A MUJERES, NIÑEZ, ADOLESCENCIA Y JUVENTUD
 

Ante la ola imparable de violencia e impunidad que afecta la integridad y la vida de mujeres, niñas, niños, adolescentes y jóvenes en El Salvador, las organizaciones defensoras de Derechos Humanos abajo firmantes, nos pronunciamos con vehemencia, alertando a la comunidad nacional e internacional sobre esta grave situación que algunos pretenden invisibilizan o utilizar. 

·         Algunos datos oficiales del 2013 retomados del Observatorio de Derechos de Niñez y Adolescencia, nos introducen a la cara vista de la violencia y nos dejan entrever el subregistro, la cifra gris, lo que no se contabiliza, lo que no queda al descubierto, lo que no se cuenta pero que existe:

o    264 Homicidios en personas entre 0 a 17 años y 215 Feminicidios

o    157 Niñas y Adolescentes Desaparecidas de 0 a 17 años y 16 Mujeres Jóvenes de 18 a 28.

o    145 Niños y Adolescentes Desaparecidos de 0 a 17 años y 27 Hombres Jóvenes de 18 a 28.

o    1977 Violaciones Sexuales, 1820 en Niñas y Adolescentes y 157 en Niños y Adolescentes.

·         La violencia contra mujeres, niñas, niños, adolescentes y jóvenes no puede ser justificable ni aceptable, el Estado salvadoreño tiene la obligación de garantizar la vigencia plena de los derechos y brindar la protección necesaria, hasta el máximo de sus posibilidades y de manera absolutamente prioritaria en el caso de la niñez y adolescencia como sujetas y sujetos de derechos que son irrenunciables.

·         Que El Salvador sea parte de los países con más alto índice de femicidios/feminicidios no es una realidad que se pueda y se deba ocultar como se ocultan los cuerpos en cementerios clandestinos.

·         Realidades de acoso sexual donde las víctimas son coaccionadas a no denunciar para no perder el trabajo y son revictimizadas, perseguidas, desprestigiadas, procesadas y algunas veces obligadas a buscar asilo internacional.

·         Violadores sexuales “connotados” que hasta espacio mediático tienen, ante una sociedad que fácilmente olvida, no reclama ni censura.

·         Niñas embarazadas, con VIH e infecciones de transmisión sexual producto del abuso sexual sistemático de familiares y conocidos.

·         Niñas, niños y adolescentes expuestas y expuestos habitualmente a la violencia física, sexual y psicológica en el hogar, la escuela, comunidades, espacios públicos y hasta dentro de instituciones de protección, resguardo y de detención, muchas veces legitimada y consentida por el Estado y la sociedad.

·         El efecto devastador de la violencia trasciende a secuelas de alto impacto individual y social.

·         La cada vez más creciente utilización de mujeres de diferentes edades, adolescentes y jóvenes en prostitución y pornografía como manifestaciones de explotación sexual comercial, bajo la tolerancia y estigmatización social.

·         Tratantes de personas encubiertos bajo fachadas legales, mientras “paguen sus impuestos”.

·         Utilización de niñas, niños y adolescentes por estructuras delincuenciales organizadas para la comisión de graves delitos como violaciones y asesinatos.

·         Utilización de mujeres jóvenes y adultas como mercancías sexuales o “mulas” para el trasiego de droga, chips e información frente a la mirada cómplice de autoridades.

·         Mujeres jóvenes y adultas que luego de ser usadas y “recicladas” son “desechadas” desmembrándolas, incinerándolas y ocultando lo que quede de su cuerpo.

·         Desapariciones diarias, sin rastro ni destino y con el miedo de sus familiares a flor de piel “sobreviviendo” en silencio para proteger a “los que quedan”.

·         Criaturas de 8 años que extorsionan, de 9 que violan, de 10 que asesinan, es cruel evidencia de lo retorcido y perverso de los pasos que como país hemos dado.

·         Los oasis que hemos ido construyendo sin importar los gobiernos de turno, a lo largo de los tiempos, con las experiencias exitosas de prevención de violencia y cultura de paz nos están siendo arrebatados por una avalancha falaz de quienes no sólo quieren controlar territorios sino también nuestras vidas.
 

Frente a este grave problema social, nuestras instituciones están obligadas a denunciar, visibilizar y  exigir un abordaje urgente y serio de parte de las instituciones responsables; el contexto electoral, que se seguirá prolongando hasta el próximo año, no debe seguir utilizándose como pretexto para  no enfrentarlo. Está de por medio la vida y la seguridad de las victimas que demandan justicia y protección del Estado. 

La sensatez, el respeto y la responsabilidad ineludible de enfrentar la grave crisis de violencia debe anteponerse a la corrupción  y a la pérdida de valores , la impunidad legal y social,  la fragilidad de la institucionalidad  ,del tejido social y  las profundas inequidades sociales y económicas, deben ser combatidas con estrategias más efectivas, menos erráticas. Y desarticuladas en la persecución al crimen, al sesgo patriarcal, sexista y adultista.  

Exhortamos a las organizaciones no gubernamentales de derechos humanos a unirse a esta demanda;  a la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos a velar porque los  tres órganos de gobierno  implementen las medidas urgentes que se requieren, y al Estado en su conjunto, a reconocer que esta amenaza contra las personas más indefensas de nuestra sociedad no puede seguir postergándose. 

Llamamos a la opinión pública, a los medios de comunicación, y a la  población en general a abandonar esta actitud indiferente frente a nuestra niñez, adolescencia y juventud, y a asumir con responsabilidad el compromiso de aportar colectivamente a la defensa y el respeto de sus derechos humanos. 

Las abajo firmantes, somos organizaciones defensoras de derechos humanos cuyo trabajo nos da autoridad para exigir al Estado, al Gobierno de la República y a las organizaciones de la sociedad civil, a que busquemos estrategias de intervención articuladas, en el marco de un diálogo respetuoso que enriquezca las respuestas y soluciones a tan grave problemática.


San Salvador, El Salvador, 8 de Marzo de 2014

 

Asociación Hombres Contra la Violencia
Centro Bartolomé de las Casas
Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos Humanos – CLADEM El Salvador
Instituto de Investigación, Capacitación y Desarrollo de la Mujer – IMU
Instituto de Estudios de la Mujer “Norma Virginia Guirola de Herrera” CEMUJER