Martin Mulligan
Foto: Cortesía del Teatro Justo Rufino Garay
Era las 2 de la tarde de un miércoles cualquiera bajo el inclemente sol de esta Managua que no se apiada de las pieles. 10 estudiantes de teatro de la Escuela Justo Rufino Garay, salieron de la sala y caminaron a la parada de bus más cercana.
Ahí ascienden a una ruta y se dispersan cotidianamente por un pasillo forzado por el cobrador que les exige que avance, “que en medio está vacío”. Pero repentinamente un hombre interpela a su pareja, es arrogante, “sos soberbio”, le dice un señor al lado que se levanta porque no soporta la humillación con la que trata a la mujer, muy afectada, nerviosa por la situación engorrosa que le hace pasar su compañero.
Un joven detrás, le mete leña al fuego poniéndose del lado del marido abusador: “uno no puede meterse si ella no reacciona”. Mas otra señora, reacciona, y luego más personas toman bandos, o asumen su silencio evadiendo el episodio –ya suficiente problemas tendrán en sus hogares– pero en cuestiones de minutos, el bus se ha caldeado hasta que un hombre, al ver una patrulla de policía en la calle, que dice también ser agente de civil, le dice al chofer que detenga el bus para que se lleven preso al marido.
La mujer llora. Y otra mujer, Lucero Millán, alza la voz para aclarar a las personas: “señores lo que acaban de ver es teatro, y es un ejercicio de reflexión para abordar el tema sobre la violencia intrafamiliar”.
Los actores hicieron su parte, pero muchas personas también entraron a la obra sin lograr percatarse. Los actores se disculpan, hay risas de catarsis en el ambiente, la obra ha concluido. Bajan del bus y esperan el siguiente.
Por más de seis meses, 15 becarios de la Escuela de Teatro del Justo Garay se prepararon para abordar este y otros temas sociales en las calles y buses de Managua, invitando a La Brújula a seguir sus peripecias.
El proyecto fue parte de talleres auspiciados por el Fondo Común con el propósito de formar a actores para utilizar el teatro como vehículo de reflexión social desde la técnica denominada Teatro Invisible.
Es una técnica que consiste en la representación de una escena, en un lugar público sin que el público presente esté informado al respecto, con el propósito de involucrarlos en una situación predeterminada, provocando la reacción de los presentes.
El principal objetivo de esta variante es transformar a los presentes, de meros espectadores, en actores transformadores de la acción dramática.
Los becarios por una semana este teatro por las calles de Managua, abordando otros temas como la basura lanzada desde buses, o la corrupción con el ejercicio sencillo de “colarse” en las filas de instituciones.
También en otra ocasión, se tomaron uno de los bulevares capitalinos en vestidos de baños con un rótulo que anunciaba: “Disfruta tu ciudad”. Con esto pretendían llevar el mensaje de que aunque Managua no presta las condiciones para acoger a sus visitantes, es posible igualmente disfrutarla.
Los jóvenes becarios se mostraron tensos y nerviosos el primer día pero poco a poco cogieron la confianza y aprendieron a involucrar a las personas.
Apartándose del perfomance y el happening, que apela más a elementos lúdicos y no necesariamente involucra a las demás personas, el teatro invisible parece ser una nueva propuesta de arte callejero que entusiasmará a los jóvenes actores para llevar obras fuera del escenario. Y usted, animase, seguro pronto aparece en una de ellas
Desde Barcelona estamos empezando un nuevo grupo con el que pensamos trabajar en ello. Antes hice durante un año acciones de este tipo y me parece que como actor, es una de las sensaciones mas apasionantes que he experimentado nunca. Llegas a involucrarte tanto en la accion que a momentos no distingues ficcion-realidad.
ResponderEliminarcomo apunte decir, que el teatro invisible funcona plenamente solo cuando los presentes en la accion, no saben que acaban de presenciar algo premeditado, sino que creen que lo que acaba de ocurrir es un episodio real de sus propias vidas. Es entonces cuando llega la verdadera reflexion por parte del espectador, si lo explicitas, pierde valor.
David Lotine
Que Genial!!!! Larga vida a las actrices y a los actores!!!! Paz y Amor para la humanida.Kare de Neuquen.Patagonia argentina.
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