"DENUNCIA: El Feminicidio de la niña María Odalina Díaz
Jocoaitique, Morazán, el pasado 9 de febrero de 2009, María Odalina Díaz, de 12 años de edad, fue víctima de un acto de barbarie y misoginia perpetrado por su tío Marco Fidel Chicas de 46 años, quien la asesinó a machetazos por negarse a vivir con el, y seguir siendo abusada sexualmente.
El suplicio de la niña María Odalina Díaz, comenzó cuando su tío Marco Fidel Chicas, conocedor de las precarias condiciones económicas de su prima (Madre de la niña), que le impiden cubrir las necesidades de sus seis hijos, le pide que le diera a María Odalina Díaz para ayudarle con el sostenimiento y sacarla adelante.
Lo que pareció un gesto de buena voluntad para aliviar la pobreza de la familia fue la excusa para llevar a la niña a vivir a su casa y comenzar una historia de abuso sexual, incesto, y violencia psicológica.
Un año después, enfrentando todo tipo de adversidades la niña regresa con su madre, y éste la acosa por cinco días para pedirle regresara con él.
Al no poder controlar la decisión de rechazo de la niña, este decide seguirla a la salida de la escuela y asesinarla.
Consideramos que estos hechos no se pueden seguir catalogando como un crimen “pasional”, Este flagelo que culminó con el extremo de la violencia, y donde se violentaron una serie de derechos, es producto de las condiciones históricas que generan prácticas sociales y culturales que permiten atentados contra la integridad, la salud, y las libertades de las mujeres, donde los hombres ejercen control y violencia sobre los cuerpos y las vidas de las mujeres y niñas, en un contexto social que continuamente legitima tales actos.
Esta legitimación, es evidente cuando las autoridades policiales, judiciales, municipales, educativas y de salud no actúan de manera contundente y rápida para penalizar el incesto, abuso sexual, haciendo caso omiso a las leyes nacionales y compromisos internacionales de derechos humanos suscritos por el país, en donde literalmente “dice que la violencia contra la mujer es cualquier acción o conducta, basada en su género, que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el ámbito público como en el privado.
Por lo tanto, nos encontramos frente a un caso de violación de derechos humanos, donde los aplicadores de justicia no actúan de forma oportuna para que los agresores sean castigados y no sigan cometiendo más delitos, sino prefieren sumarse a la naturalización y tolerancia social de estos actos, aduciendo no contar con una denuncia formal para poner a disposición los recursos y poder del Estado que ellos representan.
Por tanto demandamos:
· Que se detenga la violencia contra nosotras tanto al interior de la casa como en todo espacio público donde participemos.
· El estado salvadoreño adquiera un compromiso expreso para prevenir la violencia hacia las niñas y mujeres.
· Que se reconozcan y atiendan con acciones concretas, las desigualdades y vulnerabilidad que viven las niñas.
· La intervención de oficio por los aplicadores de justicia, para investigar y castigar este tipo de delitos.
· Un rol más activo por parte del sistema educativo, sistema de salud, y autoridades municipales en cuanto a la detección y denuncia de casos.
· Escuchar las voces de una ciudadanía consiente del derecho de todas a vivir una vida libre de violencia, que repudie, se pronuncie y actúe ante el incesto, abuso sexual, y asesinato de mujeres y niñas.
· Programas que atiendan radicalmente la condición económica y de discriminación de las mujeres.
Al mismo tiempo reafirmamos nuestro compromiso por seguir trabajando en construir una sociedad libre de violencia contra las MUJERES."
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